sábado, 9 de abril de 2011

3 puntos clave para meditar antes de poner en práctica todo el poder de nuestra indignación


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Llegará el momento en que los ciudadanos españoles estallarán en movimientos de indignación, y esas reacciones serán tan fuertes que podrán cambiar muchas cosas: los gobiernos, las relaciones de poder, la satisfacción de las necesidades de bienestar social.
El español tiene hoy ante sí, tres campos de pensamiento que alimentan su indignación. No nos dejemos engañar con las discusiones que se provocan en las campañas electorales, ningún ganador hará nada en el terreno de las verdaderas preocupaciones que tenemos ante nosotros.
Se trata de carencias escandalosas que la población en el logro de un bienestar elemental, que está dentro de las normas constitucionales y de las exigencias de las declaraciones de derechos humanos, y que no lleva camino de ser una realidad, sino de rebajarse  hasta la desaparición de lo ya conseguido. Cada vez, los ricos son más ricos y los pobres. más pobres.
Hay que pensar en el necesario rescate de una SEGURIDAD SOCIAL gratuita y para todos; ahora cuando la avidez liberal propugna el co-pago para quitarse cargas y poderse gastar el ahorro en compensar el despilfarro de la propia administración.
Se trata también de las PENSIONES de todas clases. Dicen que se han bloqueado, pero la realidad es que se han disminuido. Y ahora hablan de que se van a recortar las más altas, pero nada dicen de devolver las cuotas que muchos han pagado durante bastantes años.
Y, por último, la verdadera fiera mitológica que devora a los ciudadanos, lo que han venido a denominar “LOS MERCADOS”. O sea, el capital acumulado, los ahorros puestos en renta, en definitiva, los BANCOS y CAJAS que manejan nuestro dinero y, encima, nos cobran por ello. Por añadidura, estos mercaderes, cuando los “chanchullos” les fracasan, reciben auxilio de la Administración, eso sí, con nuestro dinero.
Ya sabemos en que campos tiene que desenvolverse nuestra indignación y nuestra resistencia pasiva. No confiemos en quienes defienden estas situaciones y hagamoslo con los medios que tengamos a mano.

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